Es un proceso planificado para trasladar comunidades de manera justa, garantizando que quienes se vean afectados por el proyecto tengan condiciones de vida iguales o mejores. Esto incluye nuevas viviendas, compensación económica y restablecimiento de sus medios de vida.
Un reasentamiento no es un desalojo. Mientras un desalojo deja a las personas sin alternativas, nosotros invertimos RD$18,000 millones en viviendas dignas, terrenos y apoyo para garantizar un futuro mejor.