El reasentamiento es mucho más que un cambio de vivienda. Implica despedirse de espacios cargados de historia y adaptarse a nuevas condiciones de vida. En este tránsito, las emociones y las expectativas ocupan un lugar central. Conscientes de ello, hemos diseñado un programa de acompañamiento psicosocial para nuestro proceso de reasentamiento que permita que cada familia viva este proceso con dignidad, apoyo constante y herramientas para avanzar hacia un futuro sostenible.
El acompañamiento psicosocial es un proceso de orientación y apoyo que ayuda a las familias a vivir tres momentos clave del reasentamiento:
- Prepararse antes del traslado
- Organizar la mudanza
- Adaptarse al nuevo hogar
Este acompañamiento incluye visitas a los hogares, talleres comunitarios y espacios de diálogo. Se centra en la escucha, la planificación y la creación de acuerdos que hagan posible una transición organizada y respetuosa para buscar:
- Facilitar la preparación de cada familia para el cambio
- Acompañar en la mudanza y en la despedida del lugar de origen
- Brindar herramientas para adaptarse a nuevas condiciones de vida
- Involucrar a todos los integrantes del hogar en el proceso
Además, con este acompañamiento se promueve la resiliencia y se fortalecen las capacidades de las personas involucradas para afrontar cada una de las fases del proceso. Para permitir el bienestar emocional, social y comunitario de las y los beneficiarios, este proceso consta de tres etapas:
El acompañamiento psicosocial es un proceso integral y continuo que requiere sensibilidad, conocimiento técnico y compromiso ético. Y debe ser abordada con una perspectiva centrada en la dignidad humana, la participación activa de las personas y la promoción de su bienestar.
Cómo prepararse para la mudanza
Preparar una mudanza requiere tiempo, organización y diálogo en familia. No se trata solo de empacar, sino de decidir qué llevar, qué descartar y cómo distribuir las responsabilidades para que todos participen.
Un plan bien hecho ayuda a reducir el estrés y facilita la llegada al nuevo hogar. Cuando se está en procesos de traslado, se sugiere trabajar en tres áreas al momento de planificar la mudanza. Esto facilita la organización y ayuda a que toda la familia participe en el proceso:
- Organización del hogar: elaborar listas de chequeo, clasificar objetos y repartir responsabilidades.
- Aspectos prácticos: preparar electrodomésticos, empacar pertenencias personales y atender el cuidado de mascotas.
- Apoyo emocional: conversar sobre el cambio, involucrar a los niños y acompañar a los adultos mayores.
Estas sugerencias buscan que cada familia se sienta parte activa de su nueva comunidad.
Nuestro compromiso con cada familia
Con esta ejecución, en Pueblo Viejo reafirmamos nuestro compromiso con el acompañamiento psicosocial como parte esencial del respeto a los derechos humanos, asegurando que el desarrollo no se mida solo en infraestructura, sino también en bienestar, confianza y calidad de vida para las comunidades, buscando que cada familia reasentada encuentre estabilidad en su nuevo espacio, fortalezca sus vínculos y participe activamente en comunidad.